El patrullero, adscrito a la Policía Metropolitana de Bucaramanga, habría protagonizado dos siniestros viales tras conducir con grado tres de alcoholemia.
Por Sebastián Trujillo – Periodista TRO Digital.
La Procuraduría General de la Nación abrió un proceso disciplinario contra el patrullero Carlos Steven Cantor Sánchez, señalado de causar un doble accidente de tránsito en Floridablanca mientras conducía bajo los efectos del alcohol. Los hechos ocurrieron el 19 de agosto de 2024 y dejaron varias personas afectadas.
De acuerdo con el informe de la Dirección de Tránsito de Floridablanca, el patrullero Cantor Sánchez, quien se encontraba de civil y en día de descanso, conducía un vehículo Mazda 3, de placas KBL-171, cuando embistió una motocicleta de placa QFP-51G en la que viajaban Marceliano Antonio Meza, su esposa Diana Marcela Castellanos y su hija de seis años.
Tras el impacto, el uniformado habría abandonado el lugar, pero metros más adelante colisionó con un furgón cerca del Voladero Las Águilas, provocando un segundo accidente. Las autoridades practicaron la prueba de alcoholemia al implicado, la cual arrojó un grado tres de embriaguez, el más alto establecido por la normativa colombiana.
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Como resultado, en ese momento se le impuso una multa superior a los 30 millones de pesos y la suspensión de la licencia de conducción por 10 años. Por otro lado, la Procuraduría Provincial de Bucaramanga investiga si el uniformado, quien para la fecha de los hechos se desempeñaba como conductor del grupo de auxiliares de la Policía, vulneró los principios de moralidad y responsabilidad contemplados en la ley.
El Ministerio Público calificó de manera provisional la presunta falta como gravísima a título de dolo, lo que significa que habría actuado con conocimiento y voluntad al conducir en estado de embriaguez.
