Los maestros exigen un servicio de salud digno y la reglamentación de la Ley 91 de 1989; marchas simultáneas están previstas en Bogotá, Medellín, Cali, Bucaramanga, Villavicencio y Barranquilla.
Por: Sebastián Trujillo – Periodista TRO Digital.
La Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación , Fecode, anunció un paro nacional de 24 horas con movilizaciones en todo el país para este jueves 30 de octubre. La jornada tiene previstas marchas en varias ciudades del país y se centrará en reclamar mejoras al servicio de salud del magisterio y mayor financiación para la educación pública.

El sindicato docente detalló que la medida de presión responde a “la crisis del sistema médico del magisterio”, caracterizada por demoras en citas, falta de medicamentos, retrasos en tratamientos especializados y trámites administrativos acumulados.
Fecode informó que aproximadamente 350.000 docentes se sumarán a la jornada, lo que podría afectar la prestación del servicio educativo en más de 12.000 instituciones oficiales. Las movilizaciones se llevarán a cabo de forma cívica y pacífica, con marchas, comparsas y actividades culturales en ciudades como Bogotá, Medellín, Cali, Bucaramanga, Villavicencio, Barranquilla y otros municipios.
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Dentro de sus exigencias, la federación plantea la defensa de la Ley 91 de 1989 (que regula el Fondo Nacional de Prestaciones Sociales del Magisterio —Fomag), el fortalecimiento de dicho fondo, el cumplimiento del Acuerdo 003 de 2024, una Ley Orgánica de Competencias que reglamente el Acto Legislativo 03 de 2024, y asegurar la sostenibilidad del nuevo modelo integral de salud y del Sistema de Seguridad y Salud en el Trabajo (SSST).
Aunque Fecode aclaró que el paro no está dirigido contra el Gobierno nacional, sí hace un llamado al presidente Gustavo Petro para que atienda sus peticiones y amplíe los plazos para reglamentar reformas clave en educación pública y salud docente.

La convocatoria del 30 de octubre representa un momento de tensión para el sistema educativo colombiano, pues la movilización masiva del magisterio podría generar interrupciones en las clases y centrar de nuevo la atención en las condiciones laborales y de salud de los docentes. Para los próximos días queda pendiente qué respuesta dará el Gobierno y si se abrirá un espacio real de diálogo que evite mayores afectaciones al sector.





