La OMS alerta sobre el creciente brote de viruela del mono, ¿qué implica?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado nuevamente una Emergencia de Salud Pública de Importancia Internacional (ESPII) debido al brote de Mpox, anteriormente conocido como viruela del mono. Esta es la segunda vez que la OMS emite tal alerta por esta enfermedad, la primera fue en 2022, cuando Colombia reportó más de 3,000 casos positivos.
Redacción: Marianne Rincón – TRO Digital
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, anunció la emergencia el 14 de agosto, destacando la rápida propagación de una nueva variante de Mpox en África. La enfermedad, que se originó en el continente africano, ha evolucionado con la aparición de un clado más letal, lo que ha llevado a la OMS a actuar con urgencia. “La detección y rápida propagación de un nuevo clado de Mpox en el este de la República Democrática del Congo, su expansión a países vecinos y el potencial de una mayor propagación es muy preocupante”, explicó Ghebreyesus.
La declaración de una ESPII se basa en el Reglamento Sanitario Internacional (2005), que define una emergencia internacional como “eventos extraordinarios” que representan un riesgo para la salud pública de otros estados debido a la propagación internacional de una enfermedad. La OMS señaló que este brote de Mpox se ajusta a esa definición por su gravedad y la necesidad de una respuesta internacional coordinada.
El brote actual ha superado significativamente al de 2022, con 15 mil casos y 461 muertes registradas en lo que va del año, un incremento del 160% en comparación con el año anterior. La mayoría de los casos se concentran en la República Democrática del Congo, pero el virus ya se está extendiendo a países vecinos como Uganda, Kenia y Ruanda.
La declaración de emergencia no impone obligaciones específicas a los países, pero facilita una respuesta más coordinada a nivel internacional, agiliza la adquisición de vacunas y permite una mejor preparación para contener la enfermedad. Aunque aún no se han reportado casos de la nueva variante fuera de África, los expertos advierten sobre su potencial letalidad, ya que el 3% de los infectados en África han fallecido, en parte debido a las condiciones precarias de los sistemas de salud en la región.
La OMS y los Centros Africanos para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC África) están trabajando para contener el brote y evitar una mayor expansión del virus.