El motociclista aceptó su culpabilidad en el homicidio del alférez Ricardo Chacón García, ocurrido durante un operativo vial en diciembre del año pasado.
Por: Sebastián Trujillo – Periodista TRO Digital.
Un juez condenó a 17 años de cárcel a Gabriel Antonio Núñez Fuentes, el motociclista que atropelló y causó la muerte del agente de tránsito Ricardo Chacón García, de 55 años, durante un operativo vial en diciembre de 2024 en Floridablanca, Santander.

El fallo judicial se dio tras la aprobación de un preacuerdo entre Núñez y la Fiscalía General de la Nación. Mediante el cual el procesado aceptó su responsabilidad en el homicidio del alférez. La condena deberá cumplirse en un centro de reclusión, según dispuso el juez del caso.
De acuerdo con la investigación, los hechos ocurrieron hacia las 5:33 de la tarde del pasado 4 de diciembre, en la calle 27 con carrera 13, del barrio El Remanso, en Floridablanca. Núñez Fuentes conducía una motocicleta Pulsar 180, de placa ELA-07B, cuando desobedeció una señal de pare durante un control de tránsito e impactó violentamente a Chacón, quien intentó detenerlo al final del puesto de control.
El agente fue arrastrado varios metros por el golpe y sufrió trauma craneoencefálico severo, trauma de tórax y fracturas múltiples. Aunque fue trasladado de urgencia a la Clínica Foscal, falleció dos días después a causa de las lesiones.
“Siguió a toda velocidad, arrollando al agente e impactándolo con la parte frontal de la moto. Quedó suspendido durante varios minutos y después cayó de espalda al pavimento”, agregó el fiscal.
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Tras el hecho, el motociclista huyó del lugar. Pero fue capturado el 25 de febrero en un operativo conjunto entre la Policía Nacional y la Fiscalía Seccional Santander. Las cámaras de seguridad fueron determinantes para su identificación. Permitiendo rastrear su recorrido desde que salió de su casa hasta el momento del impacto y posterior fuga.
Durante las audiencias, la Fiscalía reveló que Núñez no portaba los documentos en regla al momento del incidente. Además, viajaba acompañado de su hija, quien iba como parrillera y sostenía un perro en brazos.
“Usted advirtió el puesto de control, a lo cual hizo caso omiso, acelerando el velocípedo y realizando maniobras de evasión en zigzag. Un policía tuvo que esquivarlo para evitar ser arrollado. Usted no contaba con Soat ni revisión técnico-mecánica del vehículo y nunca ha expedido su licencia de conducción” leyó el fiscal del caso durante su intervención.
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Por consiguiente, el juez lo declaró culpable de los delitos de homicidio agravado y violencia contra servidor público, ambos con circunstancias de agravación punitiva.
 
				




