La víctima fue alcanzada por un disparo mientras pescaba con su padre y un acompañante en la vereda el Bambú, ubicada en una arenera administrada por el procesado

Redacción: Sofía Valentina Correa Rueda- Periodista Oriente Noticias

Nelson Rodríguez Anaya, fue cobijado con medida de aseguramiento intramural en centro carcelario mientras avanzan las audiencias por el crimen de una menor de 12 años que fue asesinada en el municipio de Rionegro, departamento de Santander. El procesado es señalado por los delitos de homicidio agravado y fabricación , tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones.

Según información entregada por una fiscal de la Unidad Especial de Investigación de Delitos contra Niños, Niñas y Adolescentes (UENNA), los hechos sucedieron en la noche del 9 de Agosto, en la vereda El Bambú, donde la víctima se encontraba junto a su padre y un acompañante realizando labores de pesca a orillas de un río ubicado a un costado de una arenera del sector. Rodríguez Anaya, quien fungía como administrador del lugar, les exigió que abandonaran el lugar, a lo que el padre de la menor respondió que no se encontraban realizando ninguna actividad indebida.

Las tres personas continuaron con sus labores de pesca, minutos después, se escucharon dos disparos, uno de ellos, impactó en la zona de la garganta de la niña, que llegó sin signos vitales al Hospital de Rionegro.

Minutos después, Anaya fue capturado en flagrancia por la Policía Nacional, quien encontró la escopeta con la que disparó, oculta en la arenera. Pese a las pruebas de las Fiscalía, el procesado no aceptó los cargos.

_{Comunidad exige el cierre de la arenera}

El crimen fue rechazado por la comunidad. Desde el día de los hechos hasta hoy, la comunidad ha protagonizado plantones fuera de las instalaciones de la arenera, denunciando haber sido víctimas de amenazas por parte de los encargados del lugar.

“No es la primera vez que estos sucede, a mi hijo ya lo han amenazado, al parecer no quieren que sepamos que ahí realizan trabajos de explotación de material de arrastre en puntos no autorizados”, señaló José Izaquita, campesino del sector.

Los habitantes señalan que es un sector tranquilo, donde a excepción del asesinato de la menor no se habían registrados tragedias de esta magnitud, por lo que piden a las autoridades focalizar una investigación en las labores que ejercen desde la arenera y mayor presencia de la fuerza pública.

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