Redacción: Dayana Ramírez – Periodista TRO Digital.
Hace 20 años, el vallenato perdió una de sus voces más prometedoras y carismáticas. Kaleth Morales, con tan solo 21 años, dejó una huella imborrable en la música colombiana. A pesar del paso del tiempo, su legado sigue vivo en quienes se enamoraron con sus canciones y su estilo único.
Aquel 24 de agosto, Colombia despertó con una noticia que conmovió profundamente a toda una generación: el fallecimiento de Kaleth Miguel Morales Troya. Su propuesta musical, fresca y auténtica, lo convirtió en el máximo referente de la llamada “Nueva Ola del Vallenato”, un movimiento que él mismo impulsó con fuerza y pasión.
El trágico accidente:
Kaleth viajaba junto a su hermano Keyner Morales en una camioneta Toyota Land Cruiser gris, modelo 1997. Se dirigían por la vía entre Cartagena y Valledupar cuando, a la altura del kilómetro 43, entre Plato y Bosconia, el vehículo cayó en un enorme hueco de más de dos metros de profundidad. El impacto hizo que Kaleth perdiera el control, provocando el volcamiento del vehículo.
Ambos hermanos fueron expulsados del automóvil. Un conductor de bus que transitaba por la zona fue quien los encontró tendidos sobre el asfalto. Fue ese momento el que dio inicio a una cadena de llamadas desesperadas.
Miguel Morales, padre de los jóvenes, recibió en su casa la noticia que cambiaría sus vidas para siempre.
Inicialmente, Keyner parecía estar en peor estado. Sin embargo, durante el traslado médico, Kaleth entró en coma. Fue llevado de urgencia a Valledupar, donde, horas después, se confirmó su fallecimiento.
La despedida de Kaleth tuvo lugar en la emblemática Plaza Alfonso López, en el corazón de Valledupar. Allí, entre lágrimas, cantos y miles de seguidores, se selló el adiós físico a una estrella que, 20 años después, sigue brillando en el corazón del vallenato.
