Redacción: Luis Carlos Vega
El pasado 8 de mayo, el mundo católico recibió con esperanza al nuevo pontífice, León XIV, anteriormente conocido como Robert Francis Prevost, un agustino estadounidense con ciudadanía peruana. Su elección marcó el inicio de una semana intensa y simbólica, caracterizada por gestos de sencillez, llamados a la paz y una notable cercanía con los fieles.
Desde su primera aparición en el balcón de la Basílica de San Pedro, León XIV mostró un estilo sobrio y conciliador. En su discurso inaugural, se presentó como un “administrador fiel” de la tradición milenaria de la Iglesia, buscando cerrar heridas y reducir tensiones tanto dentro como fuera de la institución. Este enfoque ha sido bien recibido por sectores conservadores, mientras que los progresistas mantienen la esperanza en su liderazgo.
Un detalle que no pasó desapercibido fue su elección de reloj: un modelo suizo Wenger Military Ranger de los años noventa, con un costo original inferior a 150 euros. Esta elección refuerza su imagen de humildad y cercanía con el pueblo, alejándose de las tradicionales marcas de lujo.
El 9 de mayo, León XIV celebró su primera misa como papa en la Capilla Sixtina, acompañado por los cardenales que lo eligieron. En su homilía, lamentó el declive de la fe frente a otras “seguridades” como la tecnología, el dinero y el poder.
Dos días después, el 11 de mayo, ofreció su primer rezo del Regina Coeli desde el balcón de la Plaza de San Pedro. En esta ocasión, hizo un llamado urgente a la paz en conflictos como los de Ucrania y Gaza, mostrando profunda preocupación por el sufrimiento de los pueblos afectados y solicitando esfuerzos internacionales para alcanzar una paz duradera.
En su lado humano León XIV se ha dejado ver un poco más amigable y cercano de distintas maneras con los feligreses que se acercan a saludarlos, hace pocos días compartió con un devoto hincha de la Roma de Italia, equipo del que se rumoreaba que fuese hincha, esto se confirmó cuando respondió con total amabilidad y fervor “vamos, fuerza Roma”. Otro momento deportivo que tuvo como protagonista al papa en su primera semana fue la visita del italiano Jack Sinner actual número uno de la Asociación de Tenistas Profesionales.
Otro tema del cual ya se habla es su gesto de adaptación a los tiempos actuales, León XIV inauguró su cuenta de Instagram, @pontifex, el 13 de mayo. Su primera publicación, un mensaje de paz traducido a varios idiomas, acumuló más de 9.7 millones de seguidores en un solo día, reflejando el interés global en su pontificado.
Con una semana marcada por gestos de humildad, llamados a la paz y una comunicación cercana, León XIV ha sentado las bases de un pontificado que promete continuidad con el legado de Francisco, pero con un estilo propio que busca unir y renovar la fe en tiempos desafiantes.
