Redacción: Kelly Gamboa – TRO Digital
¿Sabía que muchos de los alimentos que consumimos diariamente podrían transmitirnos bacterias? En un estudio realizado en el laboratorio de microbiología de la Universidad Manuela Beltrán (UMB) se detectó la presencia de dos tipos de microbios que pueden afectar seriamente la salud.
Aunque es normal que al comprar alimentos como verduras, legumbres y carnes tengan pequeños microbios, lo recomendado para no desarrollar una enfermedad es el proceso de higiene en ellas.
Ahora bien, en el estudio realizado se analizaron seis muestras de carne de pollo de diferentes lugares, donde el análisis resulto en la presencia de la bacteria Escherichia Coli (E. Coli) “La E. Coli es una bacteria que vive en los intestinos de animales de sangre caliente. En el momento del sacrificio, si no se da en óptimas condiciones, puede pasar de los intestinos a otros tejidos que serán usados en carne de consumo. Es ahí cuando es importante tener muy buenas prácticas a lo largo de la cadena de valor. En la manipulación que hacemos en casa, está el secreto para que la E. Coli no cause ningún tipo de riesgo sobre la salud de los consumidores” explicó Andrea Cortés, microbióloga de la UMB.
Cabe destacar que en Colombia, una persona en promedio puede consumir 35.8 kilogramos de carne de pollo anualmente, dado que es la principal fuente de proteína de los colombianos según cifras de Fenavi. Por lo que es importante el debido proceso de manipulación, pues el pollo en estado crudo contiene dichas bacterias que se pueden dar por fallas en la higiene, contaminación en granjas y malos procesos de almacenamiento.
Por otra parte, otros de los alimentos estudiados en el laboratorio fue el cilantro, a pesar de que es un ingrediente primordial para dar aroma y sabores distintos a la comida, en el proceso de lavado y desinfectación se identifico la presencia de Protozoos, que son microorganismos que se alojan en ambientes húmedos o acuáticos.
¿Que producen estas dos bacterias encontradas? Primero la E. Coli puede causar nauseas, vomito, dolor estomacal y corporal y en casos más graves, desencadena insuficiencia renal y hasta la muerte. Mientras los Protozoos pueden generar problemas digestivos, dolor de cabeza, dolor muscular y fiebre.
Este análisis de la UMB, más que una alerta sanitaria, es un llamado a tener buenas practicas de higiene en casa para prevenir enfermedades transmitidas por alimentos, evitando la contaminación cruzada, básicamente evitar usar el mismo cuchillo o tabla para preparar carnes crudas sin limpiarlos entre usos, además no limpiar correctamente las superficies puede dejar residuos contaminados que se multiplican rápidamente, provocando enfermedades alimentarias.
En el caso del pollo “Se debe almacenar en bolsas plásticas que se pueden sellar o en recipientes plásticos con tapa, de esta manera se evita la contaminación cruzada, que se puede producir cuando se guarda el pollo sin sellar al lado de una lechuga. Así los microorganismos pasan de un alimento a otro, dando paso a la creación de más bacterias”. También, para eliminar bacterias del pollo, se debe preparar con temperaturas superiores a 60° centígrados, Enfatizó Cortés, experta de la UMB.
Correcto lavado de manos, limpieza profunda en frutas, verduras y legumbres, lavado de los artículos de cocina como superficies, cuchillos y tablas, aseguraran que no se propaguen estos microbios.