Redacción: Marianne Rincón- TRO Digital

El Ejército Nacional evitó un atentado que el grupo guerrillero ELN planeaba ejecutar en Sardinata, Norte de Santander. La rápida acción de las tropas impidió que seis cilindros bomba, escondidos en una zona rural, fueran detonados en una de las rutas utilizadas por las fuerzas militares.

Las labores de inteligencia fueron clave para ubicar el lugar exacto donde los guerrilleros habían escondido los explosivos. Se trataba de un área estratégica por la que constantemente transitan las tropas en operaciones de control. Los artefactos, de 20 libras cada uno, estaban ocultos en contenedores metálicos cilíndricos y contaban con un sistema de activación a través de cables de mando.

Al llegar al sitio, los soldados aseguraron el perímetro y el grupo de Manejo de Artefactos Explosivos se encargó de desactivar los cilindros de forma controlada, evitando cualquier riesgo para la tropa y los habitantes de la zona. Este tipo de artefactos improvisados, que buscan causar daños masivos, son frecuentemente utilizados por grupos armados ilegales en la región para frenar las operaciones militares.

El atentado, que estaba destinado a impactar en las zonas rurales de Sardinata, fue neutralizado sin dejar víctimas ni daños materiales, pero subraya la continua presencia del ELN en esta parte del país. El Ejército reafirma seguir combatiendo estas amenazas y garantizar la seguridad en Norte de Santander, una de las zonas más afectadas por el conflicto armado.