Redacción: Valentina Nieto

Con un mensaje centrado en la unidad, el diálogo y la paz, Robert Francis Prevost fue elegido este jueves como el 267º papa de la Iglesia Católica. El cardenal estadounidense adoptó el nombre de León XIV, convirtiéndose en el primer papa norteamericano de la historia.

La elección se dio tras cuatro rondas de votación, en un cónclave que resultó más breve de lo previsto. Los 133 cardenales electores, provenientes de más de 70 países, participaron en el cónclave más diverso culturalmente que haya tenido el Vaticano.

En su primer mensaje desde el balcón de la Basílica de San Pedro, León XIV habló de paz, misión y comunión:

“Estamos todos en las manos de Dios, por lo tanto, sin miedo, de la mano con Dios, vayamos adelante (…). Tenemos que construir puentes para ser todos un solo pueblo en paz”, expresó.

El nuevo pontífice también agradeció a su predecesor, el papa Francisco y a los cardenales que confiaron en él. Se identificó como agustino, y resaltó su compromiso con una iglesia misionera y sinodal, que camine junto al pueblo, abierta al diálogo y cercana a quienes sufren.

Con emotividad, el papa León XIV saludó a la diócesis de Chiclayo, en Perú, donde sirvió como obispo:

“A todos ustedes, hermanos y hermanas de Roma, Italia y todo el mundo: queremos ser una Iglesia que camina, que busca siempre la paz y la caridad”, dijo en español.

Concluyó su intervención con una oración a la Virgen María y una bendición a los más de 50.000 fieles reunidos en la Plaza de San Pedro.