Las iglesias más visitadas en Norte de Santander durante Semana Santa

Redacción: Valentina Nieto

Durante la Semana Santa, Norte de Santander se convierte en escenario de actos litúrgicos que reflejan el fervor religioso de sus comunidades. Las iglesias del departamento reciben a miles de feligreses y visitantes que participan en celebraciones cargadas de simbolismo y tradición. Algunas de estas edificaciones religiosas, por su historia, arquitectura o significado espiritual, se destacan como puntos clave de peregrinación.

Una de las más representativas es la Catedral de Santa Ana, ubicada en el municipio de Ocaña. Este templo de gran valor patrimonial acoge durante la Semana Mayor a centenares de fieles que asisten a las misas, procesiones y actos religiosos organizados por la Diócesis de Ocaña. Su fachada neoclásica y su interior imponente hacen de este lugar un punto obligado para quienes buscan vivir la fe en comunidad.

Pamplona, conocida por su herencia religiosa y su arquitectura colonial, alberga la Iglesia de San José, un templo de estilo gótico que se convierte en el epicentro de múltiples manifestaciones de fe durante esta temporada. La Diócesis de Pamplona informa que esta iglesia recibe gran afluencia de visitantes, especialmente durante el jueves y viernes Santo, cuando se realizan procesiones tradicionales por las calles del centro histórico.

Además, en Cúcuta, la Catedral de San José sigue siendo uno de los templos con mayor asistencia durante la Semana Santa. La Arquidiócesis organiza actividades como el Vía Crucis, misas solemnes y espacios de oración, que reúnen a feligreses locales y turistas que llegan para participar en las celebraciones religiosas de la capital nortesantandereana.

Estas iglesias, junto a otros templos parroquiales de la región, reflejan la identidad religiosa de Norte de Santander y su conexión con las tradiciones de la Semana Santa. La programación litúrgica, respaldada por las autoridades eclesiásticas, se convierte en una oportunidad para que creyentes y visitantes vivan momentos de espiritualidad, memoria y comunidad en cada rincón del departamento.

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